Los compradores patológicos contestan afirmativamente a todas las preguntas.
Ellos tienen el llamado "Síndrome de la compra compulsiva", que pertenece a la categoría de trastornos de control de los impulsos. Es considerada una adicción, porque quienes la padecen sienten de manera recurrente una necesidad urgente e irreprimible por comprar, pese a que tiene consecuencias negativas tangibles por esa conducta.
"Si bien todos podemos excedernos alguna vez en las compras, en estos pacientes, la conducta es repetitiva, no controlable y es precedida de una enorme ansiedad que sólo se calma comprando. Son personas que sienten mucha angustia. En eso, la compra compulsiva se parece a la bulimia: tienen un sentimiento de vacío, de hambre, una necesidad de llenarse. Compran cosas que no necesitan y muchas veces permanecen guardadas en clóset, aún con la etiqueta puesta. En el fondo, no es el objeto en sí mismo los que les da placer. Es el acto de comprar. Una vez que se materializa la compra sienten mucha culpa y arrepentimiento", señala la psiquiatra Lina Ortiz.
Se trata dice, dice, de una patología subdiagnosticada, que sin embargo, es más preferente de lo que se piensa. Muchas veces es una manifestación secundaria de patologías psiquiatricas o revela una tendencia adictiva que puede también manifestarse en otras áreas.
"Es difícil detectar cuándo un comprador es patológico, porque vivimos en una sociedad muy consumista. Sin embargo, es recomendable consultar cuando la conducta se vuelve repetitiva y está dando claramente problemas: hay un endeudamiento excesivo y conflictos familiares serios que se desprenden de esta conducta", agrega la psiquiatra.
La Terapia
Para terminar con la adicción, lo primero que hacen los especialistas es ver cuáles son los factores que provocan ansiedad al paciente y qué conflictos hacen que busque satisfacción en las compras. Lo segundo, es tratar de controlar la conducta y ayudarlo en el manejo de la ansiedad, lo que requiere el uso de fármacos y terapia. También se pueden aconsejar medidas conductuales como que el paciente no maneje dinero o que por ejemplo alguien haga las compras por él.